Crochet, ganchillo, amigurumi… cualquiera de estas tres técnicas es casi lo mismo y válidas para hacer esta bonita y original manualidad, que, como veis, tiene ciento de variedades: cactus de ganchillo.

Puedes plantar estos cactus de ganchillo en varios maceteros de los colores que quieras, de distintas formas y tamaños, pero incluso el macetero puede ser de crochet.

Como podéis observar, al cactus se le pueden poner flores, ojos, boca y hasta sombreros. Dad rienda suelta a vuestra imaginación y os animo a que lo adaptéis al gusto de a quien se lo vayas a regalar.

¿Os gusta? A mí me parece de lo más divertido y original, así que ánimo.